sábado, 20 de septiembre de 2014

La lucha asimétrica

La lucha asimétrica En Venezuela existe polarización política, pero tanto el oficialismo revolucionario como la oposición pisan terrenos distintos, cada quien está desarrollando estrategias distintas aun y cuando diera la impresión que están en el mismo cuadrilátero en disputa por ser vencedor y otro vencido. Para la oposición la estrategia se agota en las elecciones, en la participación permanente en dichos procesos, a donde el oficialismo manipula para ganar. Lo más emblemático es un CNE integrado por 4 rectores chavistas declarados y confesos como condición para ser designados. La protesta que estimulan algunos líderes de oposición como expresión del descontento social por no ser una acción mayoritaria no encuentra ser el epicentro que frene al gobierno. Las competencias de la AN única instancia a donde se encuentran revolucionarios y opositores quedaron en desuso como consecuencia del excesivo centralismo, simplemente el oficialismo no quiere ejercer el control político del gobierno desde esa instancia legislativa. A ello hay que agregarle que los poderes públicos ya no tienen autonomía y ya no son contrapesos del poder ejecutivo para pasar a ser y constituirse en el soporte de todo lo que haga, dirija y ordene el ejecutivo. La revolución gubernamental adelanta siempre una campaña de denuncia contra la oposición haciéndola responsable de todo lo que sucede en el país; la oposición se defiende y condena los desaciertos de la acción gubernamental. Mientras la oposición aspira ganar las parlamentarias sin estar convencido si existe fraude o no, para revertir los avances en el cambio de modelo económico apuntalado desde las leyes aprobadas; la revolución de forma silenciosa trabaja en dos líneas o tareas a donde no encuentra adversarios u oponentes. Primero en el cambio de valores de la sociedad para que justifiquen la pésima situación de pérdida de calidad de vida que hoy tenemos en el país. El odio como política de estado que dividió a los venezolanos tiene por propósito asegurarse que siempre un sector de la sociedad los acompañe y sea su soporte. En ese cambio de valores de la sociedad encontramos el hecho reflejado en las encuestas conforme al cual un 86% de los venezolanos no quieren vivir en el modelo cubano, pero es exactamente lo que está sucediendo, estamos ya viviendo en parte de lo que es este modelo, han llevado a los propios chavistas al modelo por el que nunca hubiesen votado como paradigma de vida. El venezolano cambio y es producto de estas enseñanzas de la revolución. Frente a ello la oposición luce como restauradora del pasado, de caudillos, y no como una fuerza moderna y modernizadora incluyente. Nos quedamos en el debate pero no en aumentar los niveles de conciencia popular. La segunda línea de trabajo revolucionaria, es la edificación del estado comunal, primero con los consejos comunales a donde funda comunal manipula para que siempre quede en manos comunistas y luego en las declaratorias de comunas, organización que liquidara a las alcaldías; ya las gobernaciones no tienen en la práctica competencias. En esta lucha territorial la oposición orgánica está ausente, la revolución aquí trabaja silenciosamente y sin protagonismo de ninguna naturaleza. La revolución socialista gubernamental obliga a los integrantes de los consejos comunales y comunas a firmar documentos declarando que el objetivo es el socialismo. Una vez conformadas las comunas no les quede la menor duda que declararan las comunas como instancia de autogobierno liquidando la figura constitucional del municipio y la alcaldía y con ello liquidan la participación político partidista plural. Esto explica la asimetría que tenemos entre oficialismo y oposición, no estamos en el mismo tableo, la revolución está en un tablero distinto a donde está la oposición. La instancia electoral a donde participa la oposición está siendo progresivamente preparada para ser eliminada con participación popular. Una inmensa tarea en distintos frentes pero con dirección clara debería ser la respuesta de la oposición; pero para ello, las aspiraciones personales y grupales sean banales peleas y luchas internas en 32 partidos deben acabar para darle paso a una dirigencia que se maneje con visión de estadistas

sábado, 6 de septiembre de 2014

RADICALIZAR FUE EL ANUNCIO DE MADURO

Muchos piensan que Maduro cuando anunció un sacudón y terminó con enroques sin anuncios que muchos vaticinaban no dijo nada. Todo lo contrario, el no anuncio es un anuncio y radical. La revolución es un cambio de estructuras en todos los órdenes y niveles, no solo son cambios políticos que se convierten en una forma de dominación y de no alternabilidad, es un cambio en el modelo económico y en las formas de producción; es un cambio en la relación del estado con el ciudadano. Tradicionalmente la revolución ha sido definida como un cambio violento de estructuras. En Venezuela se estrenó una nueva forma de establecer la revolución, se hace con éxito desde los poderes públicos, desde allí se garantizan las formas que cambian o vacían la constitución. “todo dentro de la revolución, nada fuera de ella” es el principio con el que funcionan los poderes públicos. Así tenemos que la CRBV establece que el modelo político del estado venezolano es “estado social de justicia y de derecho” pero en la ley orgánica de las comunas se proclama el “estado comunal” con la finalidad de establecer las bases de la sociedad socialista. La actual constitución bolivariana la quiso el propio Chávez reformar para hacerla socialista, para sorpresa del propio Chávez hasta sus seguidores votaron en contra de tal propuesta. Desde ese momento surgió la estrategia de establecerla e imponerla por la vía de la Asamblea Nacional en forma de leyes de donde los poderes públicos con distintos argumentos van desaplicando la Constitución; un ejemplo de ello es la forma como liquidaron el 70% de las empresas privadas unas por expropiación que es una limitación a la propiedad pero nunca una política de estado ya que la constitución favorece el derecho de la libertad económica del ciudadano y estableció la obligación al estado de garantizar la propiedad privada. La constitución estableció derechos en favor del ciudadano que las leyes rojas rojitas fueron disminuyendo o eliminando, ese proceso de eliminar derechos lo justifican con cualquier argumento “guerra económica del imperio o la burguesía” y de esa manera adoctrinan a sus seguidores de que los apoyen en lo que en condiciones normales nunca habrían apoyado. Un caso emblemático es el caso de la “propiedad privada” defendida por todos como un derecho absoluto, ahora dio paso a la mal llamada “propiedad social”, el venezolano fue cambiando con el proceso y cambio sus creencias y convicciones, me encuentro en mis giras que en las comunidades que visito la gente siente que las viviendas de interés social no son de ellos pero en todo caso al estar ocupándolas se sienten bien. No se percatan que le han quitado derechos. Cuando en tiempos de democracia alguien justificar hacer cola para comprar un mercado sin antes indicar que el gobierno es malo y que su gobernante no merece repetir. Ahora encontramos que para buena parte del venezolano el valor del voto no sirve para premiar o castigar a un buen o mal gobierno, sino para apalancar al gobierno que reparte dadivas así pierda mi calidad de vida. Hemos vivido parte del proceso revolucionario aun inconcluso en razón a que la mayoría del pueblo venezolano se opone al cambio de vida que desde el gobierno se proponen. La gran pregunta que no responderé en este artículo es ¿cómo estando una mayoría en contra del modelo cubano, se impone el país ese modelo? Lo cierto es que la crisis que vivimos es causada por el cambio del modelo económico. El comunismo no es abundancia es escasez, el comunismo nunca se propuso superar la pobreza por vía de la generación de riqueza, estableció mínimos de justicia, que para ellos son las colas, se propuso el comunismo que los medios de producción son del estado y no de los particulares. La revolución conduce a los venezolanos y al sistema definido en la CRBV a un punto de “quiebre” acaba generando las contradicciones que la liquidan para que surja el “estado socialista” que no es otra cosa que el “comunismo”. Es un proceso, en Venezuela hemos tenido dos formas de gobierno paralelo para favorecer el estado comunal que se implanta y se va dejando aniquilar el modelo constitucional. Cuando Maduro no rectifica las políticas económicas y no hace ningún anuncio es porque está anunciando sin decirlo que la crisis se profundizara hasta que se quiebre el modelo y surja el estado socialista, el comunismo